México está viviendo una transformación histórica en el sector manufacturero. El fenómeno del nearshoring –la relocalización de procesos productivos para acercarlos a los mercados finales– y el Plan México han creado las condiciones para una nueva transformación industrial que fortalecerá la producción local y la economía de millones de mexicanos.
México tiene una larga historia en el ámbito de la manufactura, iniciada con el modelo de maquiladoras en los años 90. Este legado ha permitido que el país se convierta en un actor clave en las cadenas de suministro globales. Hoy, el nearshoring en México eleva ese legado, atrayendo inversiones significativas y posicionando a la industria nacional en la vanguardia tecnológica.
En cifras:
Estas cifras demuestran que México no solo es un centro de producción de bajo costo, sino que está evolucionando hacia una industria de alto valor agregado.
El Plan México es una estrategia gubernamental presentada por la Presidenta Claudia Sheinbaum, que busca alcanzar el 50% de la proveeduría nacional para su consumo interno, impulsando la sustitución de importaciones.
Entre otros puntos, en este ambicioso plan destaca:
Con el Plan México, el gobierno refuerza su compromiso de reducir la dependencia de importaciones y de impulsar la autosuficiencia industrial, consolidando a México como un hub estratégico en América del Norte.
Al digitalizar la cadena de suministro, los beneficios para el sector Industrial de México, son:
Desde los días de las maquiladoras hasta el auge del nearshoring, México ha sabido adaptarse a los cambios globales. Noticias recientes de fuentes como Reuters, El País y The Wall Street Journal destacan cómo el país está atrayendo inversiones significativas para sustituir importaciones y modernizar su infraestructura industrial wsj.com; elpais.com.
Además, la consolidación de la cadena de suministro a través de proyectos estratégicos y la renegociación del USMCA refuerzan el papel de México en el comercio global y respaldan la visión del Plan México.
El panorama manufacturero de México se redefine en esta nueva era del nearshoring y el Plan México. La combinación de inversiones, modernización de infraestructura y la digitalización de procesos posiciona al “Hecho en México” como sinónimo de calidad, innovación y competitividad global.
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